La alimentación variada asegura la incorporación y aprovechamiento de todos los nutrientes que necesitamos para crecer y vivir saludablemente. La gráfica de la alimentación saludable nos permite ver los diferentes grupos de alimentos y de esa manera considerar las porciones que debemos comer diariamente.
Una alimentación saludable incluye consumir todos los alimentos de los diferentes grupos. El primer grupo nos va a aportar vitaminas, minerales y fibra. Es el grupo de las frutas y verduras las cuales debemos consumir todo tipo y color durante el día.
El segundo grupo es el de los almidones y cereales, que nos van a aportar energía. Si preferimos los integrales vamos a sumar el aporte de fibra dietética, esencial para mejorar el peristaltismo intestinal y dar saciedad a nuestras comidas.
Luego nos encontramos con los lácteos, que son la leche, el queso, yogur y sus derivados. Ellos nos aportan el calcio indispensable para nuestros huesos y dientes y proteínas de alto valor biológico (que nos ayudan al crecimiento).
Le siguen las carnes (rojas, pollo y pescado) y los huevos. Ambos son fuente de proteínas. Las carnes además son fuente de hierro.
Los últimos dos grupos son los que debemos consumir con moderación. Las grasas y aceites que son altos en calorías pero también nos aportan vitaminas liposolubles por eso tenemos que incluirlos preferentemente en aceites crudos y frutas secas. Le siguen los azúcares y dulces que solo vienen a aportarnos energía por lo que deben ser consumidos en pequeñas cantidades.
La alimentación saludable se diseña por la nutricionista y se adapta a personas sanas con necesidades calóricas diferentes como son los niños, adolescentes, embarazadas, adultos y ancianos.